En el corazón vibrante de Medellín, donde la cultura y la gastronomía se entrelazan, existe una tradición que cautiva a los paladares más exigentes: los panes artesanales. Elaborado con paciencia y pasión, este manjar es un testimonio del talento culinario local, un legado que se transmite a través de las familias. Cada bollo, con un aroma